Feliz año 2011

Parece mentira qué bien lo hacen todo los gobernantes, sean quienes sean. Los nuestros, los de Nájera, viendo que no empieza a nevar ni paseando al santo, nos han colocado una niebla en lo alto del Castillo que da gusto verla.

Feliz año nuevo de parte del Najerino Enmascarado y del doctor Washington Rosales. Después de Reyes volveremos a la carga.

Santa María la Real EXISTE

De las notas de mi querido amigo, el profesor Doctor Washington Rosales, de la Universidad de Montevideo:

Sin duda, Nájera es un pueblo singular. Y sin ninguna duda, los najerinos son aún más singulares, si cabe, que su propio pueblo. El caso es que he dedicado un par de días a visitar los lugares más emblemáticos del lugar y he aquí mis conclusiones.

1.- En el monte conocido como El Castillo no hay castillo alguno. Parece que, de tanto utilizar ese nombre, hace poco decidieron construir uno para no quedar mal ante los forasteros, y en eso están. Pero no les ha dado la gana de llamarlo El Castillo, como habría sido lo normal. Para fastidiar lo llaman El Alcázar, que en árabe significa El Castillo: Káser es Castillo y Al es El. O sea, Al-Káser es El Castillo. Del mismo modo podían haberlo llamado Le Château, digo yo. Habría quedado más chic.

2.- En el paraje conocido como La Pirámide no hay pirámide alguna. Pregunté a un lugareño por qué no lo llamaban La Esfinge, por ejemplo, en lugar de La Pirámide. El aludido me preguntó si yo era idiota.

3.- En el lugar conocido como El Molino de san Julián no hay ningún molino ni persona alguna, en las cercanías, que se parezca lo más mínimo a ningún santo. Por si las moscas, no pregunté nada a nadie.

4.- De modo que, cuando alguien me dijo que fuese a ver el monasterio de Santa María la Real, esperaba encontrarme un solar o un huerto de lechugas. Pero no. El monasterio existe. Está justo enfrente de donde venden la lotería.

De los apuntes del Doctor Washington Rosales

Mi gran amigo el profesor Doctor Washington Rosales, de la Universidad de Montevideo, pasó unos días aquí, en casa, y dedicó su valioso tiempo a estudiar nuestra querida ciudad, así como su paisaje y su paisanaje. Dejó constancia de sus observaciones en una libretita que, no sé si por suerte o por desgracia, olvidó en el cajón de la mesilla de la habitación de invitados. Y puesto que los mencionados apuntes tratan de nuestra vida y nuestras costumbres, he decidido publicarlos. Lo haré poco a poco, de vez en cuando, como por capítulos. He aquí una muestra de los mismos:

(…) O sea, lo que se llama “dar la vuelta a los puentes” o, según algunas voces, “hacer la ruta del colesterol”. Tal actividad debería ser estudiada por una comisión de antropólogos, lógicos y demás especialistas del saber puesto que no tiene lugar en ningún otro punto del globo terráqueo. Salvo la najerense, no existe ninguna colectividad humana donde buena parte de la población femenina, ataviada con pantalones de chándal, camiseta y chaqueta atada a la cintura, se dedique a recorrer un trayecto semejante a paso de legionario. ¿Por qué lo hacen? ¿Qué puede impulsarles a comportarse de tal manera? No es ese el asunto que hoy nos interesa y, por lo tanto, nos limitaremos a dejar constancia de su existencia y pasaremos a otra cosa.

La fauna y la flora no varían excesivamente de un puente a otro. (…).

Y así continúa durante muchas páginas. Estoy seguro de que la publicación de estos textos del famoso Doctor Washington Rosales será del agrado de las mentes inquietas que pueblan nuestras calles.

Cada vez peor

Y sigue sin nevar. Desde luego, hay que ver de lo que es capaz Zapatero para fastidiarnos.

Adornos en los balcones

A medida que se acercan las fiestas de Navidad aparecen más adornos en las fachadas y en los balcones. Como siempre, los hay que tienen gracia y los hay que no. A mí, en particular, me resultan muy simpáticos los dos muñecotes de la primera foto, que invaden todo el espacio del balcón y casi de la calzada. Parece que la Navidad no pueda empezar sin ellos.

En cambio, ya me gusta menos lo de la segunda foto. Desde luego, lo que hay que ver. El partido del gobierno de la ciudad, de la comunidad autónoma y probablemente del país tras las próximas elecciones, colgando carteles de los balcones como si se tratase de una junta de vecinos. Me parece bien que proteste si tiene algo de qué protestar, pero no de esas maneras. Porque, de lo contrario, ¿qué será lo siguiente, montar una cacerolada y correr delante de su propia policía?

Un lugar muy apropiado

En el inicio de la avenida de los Toreros, a unos pasos de la parada de autobuses, hay unos cuantos contenedores de inmundicias y desechos varios. Están justo sobre el paso de cebra y ante la entrada al caminito que bordea el río. El turista que haya pasado la noche en el hotel, por ejemplo, y quiera tumbarse en la hierba o asomarse para ver el río de cerca ha de dar un rodeo a los mencionados contenedores de basuras. O pasar por en medio, vamos. Es lo primero que ve por la mañana.

Ya sé que los contenedores han de estar en alguna parte. Es evidente. Pero en alguna parte no quiere decir en cualquier parte. Porque si seguimos la regla de colocar los contenedores allá donde haya sitio, así, sin cautelas ni prudencias, el día menos pensado podemos encontrárnoslos ante las puertas de santa María la Real. Aunque no, claro: ahí no hay ningún paso de cebra.

Chorizos Gürtel

Va en serio. La empresa existe. Según he entendido se llama Productos Humorísticos del Sur SC, vende chorizos auténticos y está en la red. Su dirección es: Chorizos Gürtel

Llega la Navidad

(La imagen está extraída del libro Celtiberia Show, de LUIS CARANDELL, Guadiana de Publicaciones, Madrid, 1971. Para verla más grande, clicar sobre ella)

Las filtraciones de wikiloks

Según nos han comunicado diversas fuentes, una página web sueca ha filtrado cuatrocientos cincuenta mil documentos secretos del Ayuntamiento de Viniegra de Arriba. Se teme por la seguridad de todos los Cameros, de Soria e incluso de Anguiano.

A plena luz del día

Los famosos ladrones de bombillas han vuelto a actuar, a plena luz del día, en la calle Mayor de nuestra ciudad. “Lo del cobre es cosa de extranjeros”, ha dicho el cabecilla; “Nosotros nos dedicamos a esto, que es más castizo, más nuestro”. En la foto, los susodichos en acción.

Aviso sin mucha importancia

Para evitar gamberradas y salidas de tono he activado la moderación de comentarios. De esta manera, los comentarios de los lectores del blog no aparecerán hasta que yo dé el visto bueno a los mismos. No voy a censurar lo que vaya en contra de mi opinión, por supuesto, sino todo aquello que resulte soez, insultante o de mal gusto. Se trata de criticar cuanto sea criticable y lo merezca, pero con estilo.

El quinto puente

No es cierto que el Ayuntamiento tenga la intención de construir un quinto puente. Según esa información, a todas luces falaz y subversiva, el puente estaría construido sobre el río y comunicaría directamente la Pasarela y el Puente de Piedra. Así, los paseantes podrían pasar la tarde entera de puente a puente, como en La Oca, y tirarían porque les llevaría la corriente.

(He usurpado la imagen de juegodelaoca)

Los gamberros de río arriba

Esta mañana salía yo de casa, ataviado con mi indumentaria de civil para no ser reconocido, cuando me ha llamado un vecino del pueblo. Me ha dicho:

—Hola. Ya sé que tú NO eres el najerino enmascarado. Y es una lástima, porque si en lugar de un vecino cualquiera, fueras el najerino enmascarado, podrías colgar en tu blog unas fotos interesantes, ¿ves? —me ha mostrado entonces su móvil—. Aquí está. Es el tubo del desagüe de las obras de la piscina cubierta. Por esa razón el río baja marrón. Bueno, solo la mitad del río. La otra, no. Pero ya te digo: lástima que NO seas tú el najerino enmascarado.

—Pues sí que es interesante, sí —he observado al ver las fotos, disimulando.

—Ya lo creo —ha dicho él—. Bueno, pues me voy, vecino que NO eres el najerino enmascarado.

—Hasta luego.

O sea que era eso, me he dicho. No se trata de comunistas ni de jipis, como se sugirió hace unos días. Quienes ensucian el río son los de la piscina cubierta. He aquí, pues, un nuevo enigma resuelto. Y de un modo casual. Por suerte, nadie sospecha de mi doble personalidad.

Resultados de la primera encuesta

Los internautas najerinos, haciendo uso de su inalienable derecho al voto, ante la pregunta “¿Qué haría usted en la chopera que queda?”, han decidido por amplia mayoría que “irían a cagar de vez en cuando”.

Los resultados totales de la encuesta han sido los siguientes:

Pregunta: ¿Qué haría usted en la chopera que queda?

Respuestas:

-Una plaza dura, de cemento y sin una sombra. Votos: 1 (5%)

-Una piscina subterránea. Votos: 1 (5%)

-Una reconstrucción exacta del edificio del Ayuntamiento. Votos: 1 (5%)

-Ir a cagar de vez en cuando. Votos: 14 (82%)

Total de Votos: 17
Encuesta cerrada

La nueva ubicación de la guardería

Según las últimas filtraciones, el Ayuntamiento tiene prevista la demolición de la nueva guardería y su reubicación siete kilómetros más allá, en dirección a Logroño. Tal medida se debe al convencimiento de las autoridades de que, incluso en el lugar donde ahora se halla, la guardería aún queda cerca de algunos domicilios, y eso no puede ser.

(He pillado la imagen del periódico La Rioja. Cualquiera se atreve a ir andando hasta allí para hacer la foto, así, sin entrenamiento previo…)

Don Gil

Sois, don Gil, no es lisonja,

mentecato como un burro;

sois estólido y mastuerzo,

sois camueso y mameluco,

sois más tonto que Pichote,

sois sandio, porro y tontucio,

sois Babieca y papanatas,

sois beocio y zamacuco,

sois tonto de capirote,

zampatortas, tuturuto,

sansirolé, mamacallos,

cipote, tolondro y zurdo;

sois el que asó la manteca;

sois, don Gil, gilí y obtuso,

y sois, en fin, lo que sois,

porque sois tonto del culo.

(JORGE LLOPIS, Las mil peores poesías de la lengua castellana, editorial Planeta, Barcelona, 1973)

El dormitorio municipal para negros

Hay que ver qué bien se hacen las cosas cuando están bien hechas. Sin ir más lejos, ahí tenemos las instalaciones que nuestro Ayuntamiento tiene a bien disponer, cada año, para que duerman los braceros de raza negra que vienen a vendimiar. Sí, señor. Cuánta solidaridad. Y qué detalle, el de no permitir que duerman en el mismo lugar los vendimiadores de raza blanca. Así no hay problemas. Los blancos con los blancos y los negros con los negros. ¿Cómo? ¿Que no se trata de un dormitorio sólo para negros? ¿Que ahí puede dormir cualquiera? Y un huevo. Si es usted un najerino de raza blanca, haga la prueba y acuéstese ante las puertas de la otrora Discoteca San Fernando. A ver cuánto tardan los municipales en despertarle.

Un muro neonajerino

Antes de la remodelación de los alrededores del nuevo Puente de los Pescadores podían verse somieres viejos, trozos de cajas de madera, plásticos, hierros oxidados y otros objetos similares para separar los huertos de la tierra de nadie que había junto al río. Ahora, por suerte, ya no es así. En su lugar, en vez de ese muro tercermundista  compuesto de despojos, las autoridades han levantado una elegante valla de estilo neojanerino tardío, una especie de tela asfáltica sin florituras ni leches, que enriquece el horizonte visual y demuestra, una vez más, la contundencia de nuestro personal modo de entender el arte. ¡Viva el neonajerinismo! ¡Viva el arte bien entendido! ¡Viva la madre que nos parió!

Cerdos no

(La imagen está extraída del libro Celtiberia Show, de LUIS CARANDELL, Guadiana de Publicaciones, Madrid, 1971. Para verla más grande, clicar sobre ella)

AVISO

Ha sido hallado el pivote que la Confederación Hidrográfica del Ebro perdió cerca del nuevo Puente de los Pescadores. Se trata de uno de esos chismes que delimitan los márgenes del río y avisan de la protección legal que gozan los terrenos de los mencionados márgenes. Alguien debió arrancarlo de su sitio sin darse cuenta y lo dejó ahí, junto al Centro de Salud, a la espera de que lo recojan las autoridades y lo devuelvan a su lugar de origen.

Expediente X

Si ayer hablábamos de la misteriosa desaparición de la bola esa que había sobre un pedestal junto al inicio del Paseo, hoy hemos de hablar de otro caso no menos enigmático: la desaparición de la cuadrilla de trabajadores de la excavación del Alcázar. Esta mañana me he levantado con empuje excursionista, he ido hasta allí y, como muestra la fotografía, en los alrededores no había ni un alma. ¿Dónde han ido a parar, pues, los operarios? De sobras es conocida la ingente cantidad de dólares que nuestro Ayuntamiento invierte en cultura. Entonces… ¿Dónde están los muchos trabajadores que debían esmerarse en recomponer los muros del Alcázar? ¿Se han ido al Caribe a bailar merengue con la pasta de las subvenciones? ¿Tenían ideas subversivas y han sido exiliados a Uruñuela? ¿O los han abducido los marcianos?

El misterio de la bola desaparecida

Aunque sea un hecho incívico, ilegal y socialmente reprobable, puedo comprender que alguien se apodere de las rosas de un jardín, de las lechugas de un huerto o de una bombilla del alumbrado público. Puedo comprender, incluso, que un chalao se lleve una estatua de una plaza porque crea que queda mejor en el patio de su casa. Pero lo que no me entra en la cabeza es que alguien se haya llevado la bola que había sobre el pedestal de la foto, una bola que pesaba un huevo y medio, que no tenía nada destacable y que, además, no sirve para maldita la cosa. Pero era del pueblo. El Ayuntamiento debería inundar las calles con carteles que dijeran:

Se busca bola

Se gratificará a quien dé una información

La inauguración del Puente de los pescadores

He de reconocer que, desde el principio, he estado de acuerdo con la construcción del puente de los pescadores. Me parece una buena idea. Amplía el horizonte del pueblo y podrá ser un motivo más para dar paseos junto al río. Otra cosa son las prisas y el modo en que se ha preparado la inauguración. Eso no. Supongo que el hecho de arrasar con cuanta vegetación hubiese a la vista responde exclusivamente a la próxima visita del jefe supremo, el famoso Pedrone. Es lógico que se le quiera agasajar, pero no hay razón para poner tanto empeño en ello.

En la circunvalación de Logroño, según se entra desde Nájera, pueden verse, a mano derecha, unos jardines insulsos, insustanciales, excesivamente racionales y tan faltos de alegría que dan hasta grima. Tienen el aspecto de haber sido hechos para una novela antiutópica de ciencia-ficción, del tipo de Un mundo feliz o 1984. Creo que de ahí se ha tomado el modelo. Las máquinas han dejado el Najerilla igual de aséptico que los jardines mencionados. Pero además lo han hecho a lo bestia. Parece que Atila haya pasado por ahí.

Y es una suerte, no obstante, que el río pase por donde pasa y no lo haga por detrás del Malpica. De haber sido así, nos habríamos quedado sin monte. 

Conferencia interesante

(La imagen está extraída del libro Celtiberia Show, de LUIS CARANDELL, Guadiana de Publicaciones, Madrid, 1971. Para verla más grande, clicar sobre ella)

En invierno y en verano

A pesar de que el frío haga que a más de uno se le congelen los mocos, Santiago Viniegra continúa luciendo manga corta. Hay quien dice que el termómetro se le estropeó en el mes de agosto de 1973 y que por eso va de verano desde entonces. Otros dicen que no, que eso es calumniarle y que no es verdad, porque Santiago lleva manga corta desde mucho antes.

Local climatizado

(La imagen está extraída del libro Celtiberia Show, de LUIS CARANDELL, Guadiana de Publicaciones, Madrid, 1971. Para verla más grande, clicar sobre ella)

Hay gente mucho mala

El río baja marrón. Según fuentes de muy poca solvencia, varios desaprensivos (probablemente jipis y comunistas) han sido vistos, río arriba, echando colorante a carretadas en las aguas del Najerilla. Al parecer, pretenden fastidiar la muy encomiable puesta a punto de las riberas que está llevando a cabo el Ayuntamiento con vistas a la próxima inauguración del puente de los pescadores. ¿Qué dirá el presidente de la Comunidad? ¿Y el obispo, si viene? Es que hay gente mucho mala.

Gamberrada

Unos gamberros han colocado un cartel en el portal del nuevo edificio del Ayuntamiento que nos ha hecho reír a todos. Según el susodicho cartel, los minusválidos deberían acceder al edificio, no solo por una puerta diferente a la de los demás vecinos, sino incluso por otra calle, la de atrás. Naturalmente, eso no es posible en una sociedad pretendidamente igualitaria como la nuestra. Pero la broma es buena, y por eso merece un espacio en éste tan selectivo blog de najerinadas.

La neonajerina calle Mayor

También la calle Mayor tiene pinceladas neonajerinistas. Sin ir más lejos, el embaldosado suele repararse teniendo muy en cuenta las características de dicho movimiento artístico. ¿Falta una baldosa? Pues nada: se echa cemento, se aplana y hala, a tomar un refrigerio al bar de la esquina. Nada de dibujitos ni relieves decorativos. Lo nuestro es el arte en bruto, sobrio, contundente. ¿Qué puede haber más bonito? Ahí está, si no, el ejemplo de la Sagrada Familia: ¡vaya birria de iglesia!, ¡qué horterada, con tanto detallito, tanto revoltijo y tanta historia! ¡Cómo se nota que no la diseñó ningún arquitecto neonajerinista!

Tonto el que no pare

Ni los grandes pensadores pueden pasar por alto la obligación de detener el vehículo justo antes de la plaza de la Estrella, según se llega desde el río. Desde luego, no hay como una buena y abundante señalización para que todo vaya bien. Porque, si bien hay dos señales de STOP en el suelo y la primera nos ordena parar, la segunda anula a la primera, significando STOP al STOP —o, lo que es lo mismo, siga usted adelante—, que luego anula la señal de tráfico propiamente dicha, la de chapa, pues también dice STOP y, lógicamente, significa STOP al STOP al STOP. O sea que no caben dudas. Hay que parar y punto.

Lecciones de arte

El neonajerinismo es un estilo arquitectónico, único en el mundo, caracterizado fundamentalmente por la construcción pura y dura, sin apenas elementos ornamentales ni gaitas gallegas. A modo de ejemplo tenemos la plaza de toros La Farola, indudable icono de la nueva tendencia frente a la incomprensión y la envidia de los jipis y de los quisquillosos de siempre. También es neonajerino el nuevo edificio del Ayuntamiento, que demuestra su poderío elevándose un par de metros sobre la máxima altura de los edificios vecinos. De todo el conjunto, lo que más me gusta es el reloj. No sólo porque es muy bonito, sino porque es una obra útil al cien por cien. Gracias a ese reloj podemos comprobar si se atrasa o no el imponente reloj del monasterio de Santa María la Real, que se encuentra justo enfrente, al otro lado de la plaza.

Romance heroico

Bajaré hasta los valles rumorosos,

subiré hasta los montes encendidos,

recorreré senderos polvorientos

y trochas, vericuetos y caminos;

treparé por la frente de las peñas,

escalaré los muros del castillo,

y si no pierdo peso, por mi padre

que ya no vuelvo a hacer tanto ejercicio.

(JORGE LLOPIS, Las mil peores poesías de la lengua castellana, editorial Planeta, Barcelona, 1973)

El Rey del Mondongo

¿Qué se puede hacer con el viejo Centro de Salud, ahora que ya no ejerce de Ayuntamiento en funciones ni de ninguna otra cosa? Hay quien habla de dejárselo a diversas asociaciones culturales, al ejército, a los chinos o incluso a las monjas. En mi opinión debería hacerse una discoteca para negros. Sí, eso es. Podría llamarse “El Rey del Mondongo”. Así, cuando vengan los negros a vendimiar el año que viene, ya que no tendrán un sitio donde dormir, al menos podrán bailar.

La octava maravilla

Maravilla entre maravillas, la plaza de toros de Nájera es la envidia de Europa, América, Asia, Anguiano y Oceanía. “No puede haber un placer mayor para la vista”, ha declarado un pintor lituano muy conocido en su casa, “Esta plaza de toros debería figurar entre las grandes obras de España, junto al monasterio del Escorial, la Alhambra y la Sagrada Familia”.

Prohibido fijar carteles

Deberían multar al que puso el cartel de la foto, porque, según dice el cartel, está prohibido fijar carteles, y eso es un cartel.

La Uña

A aquel cadáver seco y pavoroso

que en vida se llamaba don Enrique

le crecía una uña del meñique

de tinte marfileño y asqueroso.

Un deseo fatal, turbio y morboso,

—disculpad que mi mente despotrique—,

acometióme al ver al alfeñique

ostentando tal uña de coloso.

En un descuido, cauto y solapado,

acerquéme hasta el lecho del finado,

hurtando el cuerpo a deudos y parientes.

Y corté aquella uña, ¡sí, cortéla!

Más tarde repulíla y afiléla.

La llevo siempre aquí, de mondadientes.

(JORGE LLOPIS, La rebelión de las musas, editorial Planeta, Barcelona, 1972)

Un proyecto nuevo

Según fuentes de dudosa procedencia, tras observar la ubicación de la muy bella y muy rentable plaza de toros de Nájera y la actual construcción de una (se supone) no menos rentable piscina cubierta, un equipo de expertos ha ofrecido su proyecto “Ríus Interruptus” al Ayuntamiento de la localidad. Tal proyecto contempla el desvío del río Najerilla a la altura de Tricio y su posterior traslado hacia Cenicero, evitando así su engorroso paso por la muy noble y muy leal ciudad de Nájera, por medio de un canal que va a costar una pasta gansa. ¿Pero qué importa el dinero allí donde sobra? El río, entonces, al no pasar ya por Nájera y hacerlo por Cenicero, dejaría de llamarse Najerilla y se llamaría Cenicerilla. No sabemos si el Ayuntamiento ha aceptado el proyecto o no.

Los carteles como forma de comunicación

Esta mañana he tenido que ir al Centro de Salud y cuál ha sido mi sorpresa cuando, a la entrada del edificio, he visto el cartel que reproduzco en la foto:

“El número 941363501 no existe”.

Bueno y qué. Tampoco existe el Pato Lucas y no vamos por ahí colgando carteles. Se me ha ocurrido pensar que tal vez el mencionado cartel sea la obra de un muy quisquilloso sabio que pretende inundar el pueblo de mensajes parecidos: “Colón descubrió América”, “Enero es el primer mes del año” o “Nájera necesita unas pistas de tenis en el Molino de san Julián”.